
Para los que no sepáis de que va, resumo el argumento. Unos vertidos tóxicos en el río provocan que aparezca un monstruo que sale de su guaridad para atacar a los habitantes de Seul. Entre las víctimas que el monstruo se lleva, está la hija adolescente del protagonista, un dependiente de un puesto de comida. Junto a su familia intentará hacer frente al monstruo y rescatar a la niña antes de que sea tarde.
¿Parece heróico, a que si? Pues nada más lejos de la verdad. La familia protagonista es lo más inútil que se puede ver. Son todos unos personajes patéticos y ridiculos, además de muy torpes, que cada vez que intentan arreglar la situación solo consiguen empeorarla y hacer el ridículo más espantoso, causando la hilaridad del público. Obviamente esa es la intención (baste ver si no el gag un poco chabacano del bizco). Sin embargo, hay también algunos momentos bastante trágicos, que , mezclados con las escenas de terror y de acción (que son más bien pocas) producen una sensación extraña en el espectador. Tanta mezcla de géneros confunde y hace que salgas del cine sin saber muy bien lo que has visto ni si te ha gustado. Al final te quedas con la sensación de que, lo que has visto, es una especie de Los hombres de Paco en coreano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario